jueves, 13 de agosto de 2009

Cada cien años


Hace rato que postee lo de las leyes Murphy, talión, embudo y demás empezamos a comentar mi papa y yo que estamos bien mal y le comente que en casi todos los medios de comunicación se menciona que en México nos gusta hacer revoluciones cada 100 años y analizamos un buen de cosas que les pongo acá. En 1810 nuestros antepasados mexicanos lucharon para lograr la independencia de los españoles y el 1910 lucharon nuevamente para terminar con la dictadura de más de 30 años del Gral. Porfirio Díaz. Ninguna de estas 2 revoluciones tuvo muy buenos resultados, ya que pareciera que los mexicanos estamos acostumbrados a luchar por nuestros propios intereses pero no por los de alguien más y menos aún por los intereses del país. El 2010 está muy cerca y para como están las cosas actualmente en México, no es demasiado aventurado pensar en una nueva revolución en el año 2010, con la diferencia de que tal vez esta sea una revolución social.

Amo mucho a mi país pero la verdad es que tenemos un buen de cosas horrendas, que ¡OJO! No solo ocurren aquí pero pareciera que se han agravado en los últimos tiempos.

El crimen organizado.


Desde su llegada al poder, el presidente mexicano Felipe Calderón decidió atacar de modo frontal al narcotráfico utilizando el ejército para combatir a los cárteles de la droga más importantes. Los resultados: algunos líderes de cárteles capturados, una gran cantidad de soldados y jefes policíacos y civiles muertos y un clima de miedo entre toda la población del país.


En ciudades relativamente tranquilas comenzaron a ocurrir matanzas a plena luz de día y en las ciudades más conflictivas la situación empeoró. Mi pregunta aquí es: ¿Cuál es la idea del Presidente Calderón? ¿Eliminar a todos los narcotraficantes? o ¿Meterlos a todos a la cárcel para que sigan operando desde dentro de sus celdas? Aunque seguramente el propósito es bien intencionado, esta estrategia de combate al crimen organizado está destinada al fracaso. Los cárteles que se sienten amenazados por el ejército obviamente estarán reforzando aún más su armamento y con los enormes recursos económicos que tienen, rápidamente superan al armamento del ejército. Es muy bien sabido que combatir la violencia con violencia únicamente generará más violencia.

La inseguridad.


Hace poco platicaba con unos amigos de la universidad de que nos iban a cambiar a la tarde en la Uni, todos nos alarmamos porque en la noche el barrio anda muy solo y eso es super peligroso…porque además del narcotráfico, existen el secuestro, la extorsión, al asalto, al robo en viviendas y de automóviles, y cualquier otro tipo de actividad criminal imaginable. En las grandes ciudades, resulta muy arriesgado para una persona caminar sola por las calles, y mucho más si se trata de una mujer o de un niño. Nos resulta absurdo caminar de noche por las calles o visitar un parque público. Lo peor de todo es que nos estamos acostumbrando a vivir de esta forma.

El desempleo y la pobreza.

La población crece rápidamente y asimismo el desempleo. Existen muy pocas posibilidades de empleo disponibles para los millones de personas que necesitan llevar alimento y vestido a sus hogares. Las nuevas empresas a su vez, tienen enormes dificultades para crecer debido al poco o nulo impulso que reciben por parte del gobierno. La excesiva cantidad de trámites, la enorme dificultad para el pago de impuestos, los impuestos crecientes como el IETU, la crisis mundial y la inseguridad son causa de gran desaliento para los empresarios actuales y para los nuevos emprendedores.

La corrupción.


Aún los ciudadanos que estamos fuera de las actividades delincuenciales mencionadas antes, estamos habituados a vivir dentro de una cultura que fomenta la tranza o la corrupción, aunque sea en situaciones mucho menos graves. Por ejemplo, es muy común utilizar el influyentismo a la hora de conseguir empleo o incluso al ingresar a una escuela o universidad. No es muy raro ver que un estudiante no es seleccionado en una escuela por el simple hecho de no tener una palanca (un conocido con influencia) dentro de la institución. Sin mencionar la clásica mordida al poli.


La cultura.


El peor problema que tenemos los mexicanos es la cultura tan equivocada que existe respecto a estos temas. Cada vez más mexicanos se adhieren las organizaciones criminales como un medio para obtener los bienes necesarios para subsistir, pisoteando los principios y valores más fundamentales de la vida. A menudo llegamos a pensar que la víctima de un delito es también el culpable por no implantar medidas de seguridad adecuadas para su protección o la de sus bienes. Muchos mexicanos compran mercancías de muy dudosa procedencia y luego se preguntan porque alguien les roba sus bienes. Muchos mexicanos no le dan la importancia adecuada a la educación porque aceptan que la forma más sencilla de conseguir un empleo es mediante el influyentismo. En lugar de reprochar y castigar a los políticos corruptos nos preguntamos cómo podemos hacer para conseguir un hueso (posición) en el gobierno. Los mexicanos también sabemos que la forma más fácil para realizar cualquier trámite gubernamental es mediante una mordida (aportación económica ilegal) a un funcionario de la dependencia en cuestión.

La crisis económica mundial.


Aquí entra lo de la ley de la conservación de la miseria de los post anteriores. La actual crisis económica mundial solo viene a agravar la situación. El peso se ha devaluado de forma considerable y parece que así seguirá haciéndolo durante todo el año. Los pobres lamentablemente serán aun más pobres, muchas empresas cerrarán y otras tendrán pérdidas importantes y se verán en la necesidad de despedir a muchos de sus empleados, entre muchas otras situaciones negativas potenciadas por la crisis mundial, pero sobre todo (y no debemos olvidarlo) derivadas en primera instancia de la propia estructura ineficaz del país.

Una bomba de tiempo.


Los mexicanos hemos convivido con estos enormes problemas por varias décadas, sin embargo, en los últimos años algunos de ellos se han agravado de forma criminal (osease un buen bastante), sobre todo la inseguridad. La situación no está muy lejos de hacer explosión; en los últimos años se han presentado varias manifestaciones ciudadanas en pro de la paz y el combate a la inseguridad. El crimen ha comenzado a tocar a personas que antes eran intocables, como empresarios con alto poder económico, políticos e importantes líderes de opinión. En los últimos años se han presentado ataques terroristas en algunas zonas del país. Cada vez son más las voces que claman justicia y cada vez se hacen escuchar más fuerte. El problema de la inseguridad se ha incrementado en tal magnitud que se ha convertido en una enorme burbuja que está a punto de explotar.

Hay 2 tipos diferentes de revoluciones que se pueden presentar, la primera y más obvia es:

La revolución armada.


Esta es la revolución de las armas, la guerra del estado contra los cárteles de la droga, la guerra entre las organizaciones criminales, la guerra entre los partidos políticos, la guerra entre los ciudadanos y los delincuentes, la guerra entre las empresas y el gobierno, la guerra entre los ciudadanos y el gobierno y la guerra entre los propios ciudadanos. Cualquiera de los métodos anteriores sin duda alguna arrojará resultados negativos, ya que todos están basados en premisas incorrectas y egoístas: yo gano y tu pierdes, yo gano y los demás pierden, tu pierdes aunque yo pierda, etc., por lo tanto debemos hacer hasta lo imposible por evitarlos.

La revolución social.


No todas las revoluciones son malas. Existen revoluciones que han cambiado y mejorado al mundo: la revolución industrial, la revolución tecnológica, la revolución científica, la revolución de la India, etc. Para salir de este profundo hoyo, México necesita una revolución de este tipo:


• Una revolución social
• Una revolución a favor de la educación
• Una revolución a favor del respeto a los principios fundamentales de la vida
• Una revolución a favor de la vida y la salud
• Una revolución a favor de la verdad y el amor
• Una revolución a favor de México y los mexicanos
• Una revolución a favor de la humanidad
• Una revolución a favor de la generación de riqueza (en lugar de hacerla contra la pobreza)
• Una revolución a favor de las empresas productivas
• Una revolución a favor del servicio a la sociedad
• Una revolución a favor de las familias sanas
• Una revolución a favor de la capacitación y el adiestramiento de las personas
• Una revolución a favor de los emprendedores
• Una revolución a favor del fortalecimiento académico de las escuelas y las universidades
• Una revolución a favor de los maestros, instructores, científicos e investigadores
• Una revolución a favor de los estudiantes y personas con deseos de superación
• Una revolución a favor del empleo y los negocios productivos
• Una revolución a favor de una economía responsable
• Una revolución que fomente el trabajo colaborativo entre las personas
• Una revolución que nos haga más capaces de servir a los demás
• Una revolución que busque el bienestar de todos.

1 comentario:

Unknown dijo...

...elogiarte?, felicitarte?, animarte?...
No lo necestas creo que sabes muy bien lo que tienes y para donde vas; lo unico que se que al momento de estar leyendo esto no sabes que acabas de adquirir y que seguramente en tu alteruniverso no necesitas pero... bueno es otro admirador-seguidor (yo).
Chido niña gato siguele como vas es un blog muy personal que no cambie espero con ansias tu proximo post.
/l、
゙(゚、 。 7
 l、゙~ヽ
 しし し )ノ perdon que lo ponga pero me encanto ji
buuuu!!!!!


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